Hace 40 años estaba en cartelera el Regreso del Jedi.
En un arranque de innovación para la época, mis papás me propusieron festejar mi cumpleaños número 10 yendo a ver la película con un grupo de amigos. Los más amigos.
Todos apiñados en el Sarmiento con mi mamá. Luego, línea "A" hasta Congreso, y allá mi viejo que nos esperaba en la esquina del cine.
Unos éramos más devotos a la saga que otros, sinceramente. Yo el que más. Pero aquel día todos teníamos el aliciente de vivir un plan inédito e irrepetible.
Las puertas del cine te recibían con algunas escenas de la película impresas en papel fotográfico, como el mago que intenta explicar infructuosamente su truco sin desvelarlo.
Y por supuesto el póster. El famoso afiche que unos días después mi papá me conseguiría suplicando en la distribuidora cinematográfica para que se lo regalaran.
Recuerdo con especial devoción que aquella tarde llevé mi muñequito de Darth Vader, como a un santo que se saca en procesión en días señalados. Permaneció en mi puño durante toda la proyección.
A partir de ahí los recuerdos empiezan a desvanecerse machacados por las mil veces que posteriormente volví a ver la película.
Probablemente, saldríamos conmocionados al haber descubierto que Luke y Leia eran hermanos. Probablemente iríamos a cenar a un Pumper-Nic con el verdadero rostro de Darth Vader grabado a fuego para siempre en nuestras retinas. Y probablemente aquella noche dormiríamos felices, pero con la certeza de quien sabe que con el círculo cerrado la historia se había terminado.
En 2015 volví a festejar mi cumpleaños viendo la nueva de Star Wars, a miles de kilómetros de aquel cine de Congreso, pero con la ilusión de mantener intactas las emociones de aquel día.
Esta vez no fueron aquellos amigos quienes se sentaron a mi lado, sino esas "Jawas" de ojos luminosos que hay en casa; que como canta Serrat, están condenados a cargar con nuestros dioses hasta que decidan elegir los propios.
El círculo se reabrió.
Cine GAUMONT en Plaza Congreso, Buenos Aires. En diciembre de 1983 fue una de las pocas salas elegidas para la proyección del Regreso del Jedi. Hoy, luego de una reforma, continúa exclusivamente con programación de películas del INCAA, Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales
El Regreso del Jedi se estrenaba en Argentina a principios de diciembre de 1983, casi siete meses después de su estreno internacional en mayo de ese mismo año. Curiosamente, diciembre era la fecha prevista para el estreno internacional, ya que como en la Guerra de las Galaxias, la proximidad con la Navidad favorecería la venta de todo tipo de "merchandising".
Cartelera del diario, de diciembre de 1983, con los cuatro cines de la capital que tenían la película programada para el estreno. (fuente: @Guerra Estelar)
PUMPER NIC. La primera y única cadena argentina de comida rápida. Icono de los años '80. En diciembre de 1983 entregaba el mantel individual para colorear con los personajes de la película. Incorporaba la publicidad de TOP TOYS, el fabricante nacional de juguetes que poseía la licencia de Kenner para la distribución y fabricación de los muñecos en todo el país. (fuente: @Guerra Estelar)
El título con el que conocemos hoy esta tercera entrega, no fue siempre este.
Hasta antes del estreno el título oficial era "La venganza del Jedi" (The Revenge of the Jedi), título que a George Lucas no le convencía. Dada que la venganza no es propia del espíritu y de la filosofía de los caballeros Jedi, decidió cambiar el título a último momento por "The Return of the Jedi" Una muestra son los cartones y cajas de los muñecos de la firma Kenner que ya estaban listos pero que no llegaron nunca a ponerse en el mercado con este título.
El pliego de impresión de la foto muestra los personajes de Kenner que la empresa Argentina TOP TOYS fabricaría en el país con el blister personalizado del "Regreso del Jedi". La particularidad es que TOP TOYS, fabricó sus propios moldes para no pagar la importación de los de Kenner. Como resultado las figuras resultantes son algunos milímetros más pequeñas que las originales y no traen los clásicos agujeros en los pies presentes en el resto del mundo. Finalmente la figura de Bobba Fett y Lando, como guardián de Jabba, jamás llegaron a distribuirse con este blister. Aparentemente la figura de Lando Calrissian difería demasiado de la versión oficial de Kenner en proporciones y tonalidades de pintura.
El fan-book "Guerra Estelar-La Guerra de las Galaxias en Argentina 1977-1984", ilustra como nadie este período con las particularidades de un mercado, el argentino, siempre sujeto a los vaivenes políticos y económicos que lo hacen un país díscolo a las campañas orquestadas de manera global. El material gráfico de sus páginas es el resultado de un trabajo arqueológico extenso y que refleja sin olvido ninguno el material producido en nuestro país. Un trabajo realizado por 3 fans que debería ver algún día la luz con tapa dura de la mano de una editorial. +info: Twitter @guerraestelar
"...aquella noche dormiríamos felices, pero con la certeza de quien sabe que con el círculo cerrado la historia se había terminado."
Un fin de semana de turismo por la capital del Berguedá, nos llevó de manera fortuita al mercado municipal de la ciudad buscando los aseos para uno de los chicos que "no aguantaba más".
La mitad de los tubos fluorescentes, apagados o inexistentes, denotaba que el mercado había conocido épocas mejores. Si hasta un gato se creía invisible en las zonas de tinieblas que ya nadie se preocupaba por recuperar.
Lo que hace años habían sido puestos de venta de carne, acumulaban revistas "HOLA" y "TV Guía" en los refrigeradores ya desconectados. El golpeo lejano de una cuchilla contra una madera daba la pista del porqué el mercado aún continuaba abierto. Se trataba de simples supervivientes en un mundo con "grandes superficies".
El vacío de los pasillos, sin el bullicioso trajín de propios y extraños resultaba inquietante, más aún, con el acompasado golpeteo de la cuchilla que no cesaba.
Cuando las persianas de los locales cerrados me devolvieron retumbadas las risas de mis hijos, caí en la cuenta de que el local de diarios y revistas permanecía abierto.
Puse mi ojos sobre su triste surtido y reconocí dos o tres libros medianamente actuales, pero el resto tenían la pátina del tiempo de quien deja morir un negocio lentamente.
Cuando giré la cabeza no lo pude creer. Imposible. E inmediatamente perdí la conciencia por aquellas cajas de Playmobil que habían estado allí por lo menos 20 años.
¿Nadie, pero nadie había dado la vuelta a ese mercado y se había interesado por ellas? Un Machu Picchu protegido por la selva se abría ante mi. Si hasta en algunas cajas el precio permanecía en pesetas.
Cuando me mostré indiferentemente interesado por ellas, aquella señora sólo se limitó a realizar la conversión a euros, y del resto ni siquiera conocía su precio (o ya lo había olvidado). Puso las cajas una al lado de la otra en sentido ascendente según su formato, y se limitó a añadir dos euros a cada tamaño superior en función del precio conocido. El valor de reliquia no contaba para ella.
Esa sería una pequeña burbuja de oxígeno a su condenado negocio, o el empujón necesario para cerrarlo definitivamente.
Un año más tarde decidí tentar a la suerte y volver a visitar el mercado.
El kiosko ya había desaparecido y parte de su género literario había pasado a adornar los mármoles de las antiguas carnicerías.
Bajo estas líneas, las cajas. Todas ellas fabricadas por Playmobil Ibérica, en la planta de Onil, Alicante.
Playmobil 3305, "Jinetes de Hípica". (1986)
Playmobil 3305, "Horse and Raiders"
Playmobil 3305, "Jinetes de Hípica", diorama parte trasera de la caja.
Playmobil 3305, "Horse and Raiders"
Playmobil 3088, "Explorador con Cocodrilo". (1999)
Playmobil 3088, "Alligator's ravine"
Playmobil 3035, "Mexicano contrabandista de armas". (1999)
Playmobil 3035, "Arms Smuggler"
Playmobil 3035, "Der Waffenhändler"
Playmobil 3392, "Los Payasos Músicos del Circo Romaní". (1987)
Playmobil 3392, "The Clown Act"
Playmobil 3392, "Musik Clowns"
Para los amantes de la temática del circo esta caja es una pequeña belleza, divinamente analizada (y abierta) AQUÍ en la web del "Juguetionista"
Playmobil 3392, "Payasos Músicos"
Playmobil 3830, "Guardabosques India con Osos". (1995)
Playmobil 3830, "Ranger with Kodiak bears"
Playmobil 3830, "Kdiakbären"
Playmobil 3830, "Ranger with Kodiak bears"
Playmobil 3627,"El banquete del ladrón". (1994)
Playmobil 3627, también conocido como "El banquete medieval" contiene los personajes que recrean la historia de Robin Hood, incluyendo el Sheriff de Nothingham y a"Little John" y su devoción por la cerveza.
Para los amantes de la trilogía de Volver al Futuro, octubre de 2015 no es una fecha cualquiera. Es el momento en que por obra de la mecánica cuántica Marty Mc Fly viaja al futuro. Y llega exactamente el 21 de octubre de 2015.
No tiene nada de interesante si no fuese porque hemos tenido que vivir cada uno de los 26 años que nos separaban de aquel hipotético futuro, para comprobar que finalmente los coches no vuelan, las pizzas no se hidratan; las zapatillas Nike todavía no se atan solas y las tablas de skate no levitan sobre el asfalto. Ese futuro es hoy nuestro presente.
Y aunque las Nike Mag2015, con PowerLaces, sean una promesa realizable a corto plazo, al prototipo de Hover Board realizado por Lexus, todavía le queda un largo recorrido para que Mattel lo venda masivamente como un juguete. Dos esfuerzos industriales que posiblemente no se habrían encarado para este año si no hubiese existido el film. ¡Ojalá alguien se hubiese planteado seriamente un Mr. Fusion capaz de tragarse toda la basura que hemos generado estos años!
En otros casos, la evolución natural de la tecnología sí ha permitido que dispongamos de pantallas planas de infarto, drones con cámaras de video, el uso de datos biométricos para pago o domótica, o las lentes para realidad aumentada. (quizás demasiados bienes de consumo...)
Y aunque la película de Tiburón XIX sea una falacia en toda regla, ir al cine a ver STAR WARS VIII como epílogo de una nueva trilogía, era algo inimaginable en 1989.
Pero al margen de todos estos "gadgets" y de que nadie haya podido advertir que los smartphones dominarían nuestras vidas; hay un objeto de la película que continúa desafiando el paso del tiempo (nunca mejor dicho) añadiendo más y más glamour sobre sí mismo cada año que pasa. Ese es el "DeLorean". El gran protagonista sin créditos al final de la película.
El DeLorean DMC-12, tal y como se lo conoce en el mundo automotor, ya era un auto distinto por aquel entonces. Se fabricó íntegramente en Europa entre 1981 y 1982, en Irlanda del Norte, y fue vendido en el mercado estadounidense exclusivamente, conservando el puesto de pilotaje a la izquierda y no a la derecha como en el Reino Unido.
Su carrocería, a diferencia de cualquier otro coche de serie, está construida con planchas de acero inoxidable sin nigún tipo de pintura, dotando a su figura de ese aspecto metálico, robusto y exótico inconfundible.
Era el único modelo que por aquel entonces fabricaba la compañía DMC, DeLorean Motor Company, que dejaría de producirlo abruptamente luego de la quiebra de la factoría a raíz del escándalo en el que su dueño se vió envuelto.
Su apertura de puertas de ala gaviota y su aspecto semejante a una nave espacial, decantaron la decisión de transformarlo en máquina del tiempo por los productores del film.
(¡Y pensar que un directivo había sugerido que la máquina del tiempo fuese un refrigerador!*)
Por otra parte el acero inoxidable de la carrocería "garantizaba la dispersión del flujo por todo el cuerpo del vehículo cuando el condensador se activara".
Se realizaron varios bocetos sobre la base del DeLorean (Sí, la idea del refrigerador quedó definitivamente descartada cuando imaginaron que los niños podían quedarse atrapados jugando a los viajes temporales) Y finalmente se decidió mantener la estética original de fábrica, añadiendo elementos que dieran como resultado un vehículo artesanal, salido del garaje de un científico, y no de un línea de montaje de máquinas del tiempo como enseñan algunos de los esbozos.
Bocetos de DeLorean Time Machine Back to the Future
Pero más allá de las particularidades e innovaciones que lo convierten también en un mito de la industria automotriz, lo que lo transforma en objeto de culto para el gran público es sin duda su aparición en la trilogía dirigida por Robert Zemeckis.
Seguidores y fans parece que no dudan todavía hoy en hacerse con alguna de las escasas 8.000 unidades producidas en aquel entonces, para transformarlas en un "DeLorean Time Machine".
Por suerte, para del resto de los mortales, 30 años después, pueden encontrarse diferentes réplicas a escala para saciar el hambre de los devotos al film.
Es el caso de las reproducciones de WELLY que ilustran este blog. (Resulta paradigmático, pero como en muchos otros casos, no pude dar con ninguna versión a escala o juguete producido en aquel momento. Parece que la construcción del mito también es una cuestión de tiempo.)
Estas reproducciones, fabricadas en metal y plástico, son una alternativa perfecta al elevado precio que ofrecen otros fabricantes, aunque la falta de detalle en algunos puntos haga evidente el porqué de la diferencia. (HotWheels en su versión "elite" de 1:18 es una delicia de detalles...que se pagan.)
Pero aún así, WELLY es la única que tiene el modelo con las tres variaciones a las que el DeLorean es sometido durante las tres películas, y eso es un punto a favor para que cualquier coleccionista decante la balanza hacia este lado.
Back To The Future I
DeLorean Time Machine Back to The Future - Welly escala 1:24
DeLorean Time Machine - Detalle del reactor de plutonio
Sus puertas son practicables y dejan ver su interior con algunos detalles resaltados en pintura, como los circuitos del tiempo y la manivela de contacto. Lamentablemente el condensador de flujo, alma de la máquina del tiempo, está moldeado en el mismo gris que las butacas y el resto del interior, y pasa prácticamente inadvertido.
DeLorean Time Machine - Interior
Detalle de los circuitos temporales y manivela de contacto
DeLorean Time Machine - Interior
Detalle del condensador de flujo y su reconocible forma de "Y"
DeLorean Time Machine - Interior
Detalle habitáculo
DeLorean Time Machine
Detalle dispersor de flujos paragolpe delantero
En esta versión, el modelo incluye como accesorio la vara que le permite alimentarse de los 1.21 gigawatts procedentes del rayo de la torre del reloj.
DeLorean Time Machine a punto de recibir una descarga
de 1,21 gigawatts de la torre del reloj
"...you built a time machine...out with a DeLorean?"
DeLorean Time Machine
congelado luego de su primer viaje temporal
DeLorean Time Machine 1:24
Detalle apertura de puertas ala de gaviota
Back To The Future II
Es una pena que la única diferencia que haya entre la versiones I y II de Welly sea la sustitución del reactor de plutonio por el de Mr. Fusion, alimentado por desperdicios.
Sinceramente, si en algo se distinguen entre sí las versiones reales, es en su capacidad de vuelo; y por lo tanto, esperaba con que contara de serie con un sistema basculante que le permita a las ruedas pivotar y adquirir su posición horizontal característica.
Pero no, han perdido una oportunidad única de diferenciar al modelo con aquello que lo hace distintivo en los films.
Ni siquiera han tenido el detalle de sustituir el sticker adhesivo de la matrícula "OUT A TIME", por la matrícula de 2015 con código de barras.
Pero como no quería resignarme a tener dos modelos iguales diferenciados sólo por un detalle, decidí ponerme manos a la obra y crear mi propio sistema de vuelo para las ruedas con unos viejos auriculares. Siempre con la posibilidad de volver al modelo original (sustituyendo manualmente los suplementos colocados en los ejes originales)
"Roads? Where we're going we don't need roads"
DeLorean Time Machine Back to The Future II
Welly escala 1:24
DeLorean Time Machine
Detalle del reactor de basuras Mr. Fusion
DeLorean Time Machine
El modelo no cuenta con iluminación propia en ninguno de los casos.
Fue generada de manera digital para la composición fotográfica
DeLorean Time Machine
Detalle de la toma fotográfica con trípode
La base sobre la que descansa el vehículo es un trípode articulado corriente para cámaras compactas, lo que permite fotografiarlo en diferente angulatura y mantenerlo expuesto de manera digna.
DeLorean Time Machine
Detalle toma fotográfica
DeLorean Time Machine Hover Mode
DeLorean Time Machine Hover Mode (modo de vuelo) luego de la remoción digital del trípode
Back To The Future III
En esta versión se mantiene el reactor de Mr. Fusion, y esta vez sí trae incorporado de serie la matrícula de código de barras de 2015.
El cuadro de válvulas y transistores sobre el capó están recreados con bastante detalle, pero lo que da la puntilla y pone ese punto distintivo son las llantas rojas y cromadas de 1955.
DeLorean Time Machine Back to The Future III - Welly escala 1:24
DeLorean Time Machine
Placa de matriculación de 2015 y reactor Mr. Fusion
DeLorean Time Machine
Las llantas cromadas de 1955 destacan en el modelo a escala
DeLorean Time Machine
Detalle del cuadro de válvulas y transistores de 1955 sobre el capó.
DeLorean Time Machine
Detalle de textura polvo
Encuentro que aún podría añadirse a la serie, una segunda versión de esta última y que incluyera la sustitución de las ruedas de 1955 por las de ferrocarril utilizadas en 1885 para que el DeLorean pueda regresar al presente. Por eso no es extraño encontrarse que algún fabricante ya considera esta versión como la que corresponde a Back To The Future III.
*No me olvido de aquel asterisco que coloqué mucho más arriba.
En Indiana Jones IV (El Reino de la Calavera de Cristal), Harrison Ford se protege de una explosión "nuclear" metiéndose en un refrigerador (algo también inversímil, por cierto). Pero creo que puede considerarse un guiño de parte de Steven Spielberg (productor de Regreso al futuro) a la irrisoria anécdota del refrigerador temporal.
DeLorean Time Machine
Lyon Estates Diorama
Lyon Estates Diorama
DeLorean Time Machine
Lyon Estates Diorama
DeLorean Time Machine
Para construir el pequeño diorama del cartel inmobiliario de "Lyon Estates", utilicé varios elementos cotinianos. Unas chinches (chinchetas) plásticas con los extremos y el pinche cortado son las pantallas que iluminan el cartel a las que uní con calor un "clip portapapeles doblado".
Los banderines son rombos de vinilo de color autoadhesivo unidos a un hilo de coser blanco.
Una cartulina gris con diferentes manchas y marcas hace las veces de asfalto, y el suelo terroso es una mezcla de tierra real y pan rallado.
La vegetación esponjas marinas coloreadas.
Todas las fotos están tomadas en el exterior con luz natural y sin intervención digital ninguna.
Lyon Estates Diorama
DeLorean Time Machine
Back To The Future, HotWheels
HotWheels cuenta también con la versión del modelo en escala 1:64, aunque hay que decir que el nivel de detalle y de pintura son altamente mejorables.
DeLorean Time Machine Back To the future
HotWheels - 2011
DeLorean Time Machine Back To the future
HotWheels - 2011
Años antes de que en 2011 HotWheels lanzara esta versión de Time Machine, ya tenía a la venta la versión del modelo de DeLorean sin todos los accesorios de máquina del tiempo, simplemente como coche de colección. Dado mi afán por tener un modelo a escala 1:64 del DeLorean Time Machine me propuse "equipar" con restos de objetos y basura el modelo estándar de HotWheels para convertirlo en máquina del tiempo.
No es exacto, pero conserva el espíritu del DeLorean Time Machine del film.
DeLorean Time Machine Back To the future - Custom
HotWheels - 2008
Para muy fanáticos.
A continuación, una serie de enlaces de interés que van más allá del coleccionismo y tienen que ver con la producción constante de símbolos en este mundo invadido por la cultura Pop.
Este es el trailer del film que recoge el trabajo de una serie de fans de la trilogía, que han decidido recuperar el estado original del DeLorean utilizado en las películas. Luego de haber permanecido expuesto, sufrió el abandono y su casi total desmantelamiento fruto del vandalismo en los depósitos de Universal Studios.
Si por el contrario ya viste en acción el Hover Board de Lexus, este es el video de la historia real detrás de la publicidad, para comprender porqué se trata sólamente de una estrategia de marketing.
Para obtener el efecto deseado se construyó una pista especial de skate cerca de Barcelona (Cubelles) donde unas guías de superconductores ocultas creaban la superficie propicia para que la tabla llena de nitrógeno líquido, levitara los centímetros necesarios para crear el efecto unos segundos. Luego un experto en skateboard tardó cinco meses en encontrar el punto de equilibrio para lograr las tomas finales que se ven en el comercial.
Y cómo no, Pepsi también se subió al carro de las novedades y puso a la venta 6.500 botellas de Pepsi Perfect. Botella que pudimos ver en el Café de los '80 en Back To The Future II y que saldrá a razón de unos 20 u$s para unos pocos privilegiados. (El líquido será el mismo que la Pepsi de venta masiva. La diferencia recae en el envase)
Para saber más sobre DeLorean, en www.delorean.com aún conservan las autopartes de la fábrica irlandesa que no llegaron a convertirse en vehículos montados de serie y sirven para que los coleccionistas puedan restaurar sus vehículos originales.
Por otra parte construyen sobre pedido la versión 2015 del modelo de los años 80 con los avances tecnológicos correspondientes para rodar en las carreteras del siglo XXI.
Actualización 22 de octubre de 2015
Este es el video de la publicidad de 2011, de la zapatillas Nike Air Mag.
En ese año se fabricaron una serie limitada de pares para una venta a beneficio de la fundación de Michael J. Fox de lucha contra el Parkinson. Lamentablemente carecían del sistema de atado automático Power Laces.... (el cameo del "alcalde Goldie Wilson" como cajero y el diseñador de Nike Tinker Hatfield a su lado es insuperable)
...pero Nike tal y como lo prometió anunció hoy su lanzamiento en la primavera de 2016 las Nike Air Mag con atado automático (Power Laces) y entregó el primer par al propio Michael Fox con una carta manuscrita de su diseñador al mejor estilo 1955...
"We started creating something for fiction
and we turned it into fact..."
Nike Air Mag 2015 con Power Laces Design by Tinker Hatfield Back To The Future
Lamentablemente no se venderán de manera masiva en la tienda de la esquina sino que formarán parte nuevamente de una subasta en beneficio de la Fundación del actor.
http://news.nike.com/news/nike-mag-2015
Carta del diseñador de las Nike Air Mag 2015 a Michael J. Fox
a propósito del lanzamiento.
Boceto original para el film de las Nike Mag 2015 realizado por Tinker Hatfield,
(aún entre las filas de Nike y encargado de hacer realidad el proyecto de producción real.)
Por su parte Toyota anunció en los días previos a la efeméride un lanzamiento relacionado con uno de los ingenios del film (tranquilos, no consiguió que los vehículos vuelen, pero el video no tiene "desperdicio" en los escenarios.) Enjoy!
Aquí la secuencia completa del momento en que el rayo cae en el reloj, hecha en LEGO, con la técnica de "stopmotion", respetando los mismos planos y encuadres que en el film.